CON LA HIEL EN LOS LABIOS

Con la hiel en los labios

Con la hiel en los labios, Lola López Martín
Edit. Ultramarina C&D, 2023.

Me ha resultado de gran interés la lectura del primer poemario de LOLA LÓPEZ MARTÍN (Berja, Almería, 1975), a la que me unen la amistad y la poesía.

Lola nos muestra en este libro tres aspectos que merecen ser destacados y que tienen relación con su formación y quehacer cotidiano como docente en Lengua Castellana y Literatura y como Doctora en Literatura Española e Hispanoamericana:

 

    • Por un lado, una preocupación exquisita por el lenguaje y sus constructos, por la realidad que se “nombra”.

    • Por otro lado, un interés expreso para que ese lenguaje dé voz a los nadie (tal y como escribe la propia autora en la introducción).

    • Por último, hay un diálogo pulido e interesante entre el lenguaje discursivo y el visual que no resta belleza al resultado final.

El poemario Con la hiel en los labios se muestra en dos partes. La primera, Con la hiel…, contiene poemas que son una denuncia del lenguaje del odio, del lenguaje que decide destinos como por ejemplo en el poema visual Omega:

fabricar verbos

que fecunden vientres y prendan candelas

en el pozo gélido

del odio

También aparecen poemas que muestran el silencio de los que no sobreviven. Es el caso de Mediterráneo del que podemos extraer estos versos:

…Oh, Muerterráneo, velas

el oleaje de los carnales gritos desesperados

de miles y miles y miles y miles y miles y miles y miles y miles y miles y miles y miles…

y miles…

de indocumentados

(sin nombre)

sin duelo…

convertidos en absoluta y total

nada.

O poemas “nacidos de heridas íntimas”, como apunta la propia autora en la introducción del libro, indicando que “lo personal es indivisible de lo colectivo”. Colofón acaba con la siguiente estrofa:

Este poema se terminó de componer el 14 de abril de 2018. Onomástico de Tiburcio,
Día de las Américas,
Día mundial de la risa,
Tras 9 noches de la muerte prematura de un hijo mío que nunca vivirá.

Igualmente, el poema Olvido finaliza con estos versos, que la autora dedica a su padre:

… porque la vida

es

recordar lo vivido,

la vida es

ya.

La segunda parte del poemario, En los labios…, gira en torno al lenguaje que suprime, borra o castra, que anula, que establece exclusión y fronteras, que limita los derechos, que aniquila la naturaleza… Así, en el poema visual Estadísticas vemos versos que se incrustan en una gráfica que refleja la pérdida de empleo desde el año 2007. El binomio resultante está muy conseguido, hay mucha fuerza expresiva. El mensaje final queda claro: la desigualdad social genera precariedad y exclusión. Algunos de los versos que aparecen en cada descenso de la gráfica son:

Me han despedido del trabajo.

Me han cortado la luz.

No puedo pagar el agua…

……

Y acaba con el último verso:

…se ha suicidado mi hija.

En la misma línea, este poema llamado E/Lección:

A veces, la única elección

es

conformarse con lo que no hay.

Y frente a ese “lenguaje de la dominación” también aparece otra forma de nombrar, un lenguaje que integra, que abraza las diferencias y concilia. En el poema Humana voz, dedicado a su madre, leemos:

…Palabras que abren puertas, que erijan puentes,

que sanen, que alimenten

al perro apaleado y abandonado…

Con la hiel en los labios me ha parecido un poemario singular por diversos motivos. En primer lugar, conjuga lenguaje visual y texto de forma depurada y se adentra en la poesía experimental desde un lenguaje discursivo. En segundo lugar, utiliza recursos literarios, con mucho conocimiento de causa, que ayudan a reforzar un mensaje crítico multifocal, solidario, honesto y comprometido. Así, podemos encontrar anáforas, aliteraciones, epítetos y polisíndeton (entre otros) con fines claramente expresivos.

Este libro, sin duda alguna, refleja mucho de lo compartido con Lola López: la amistad que nos une a través de la literatura, las tardes de lectura colectiva en el grupo de Poesía en el Huerto, mi admiración por su integridad y su denuncia de las injusticias o por las brechas sociales (género, etnia…), su conocimiento del lenguaje y su proyección como acción poética. Quiero finalizar destacando su sensibilidad por el deterioro ambiental que, de una u otra manera, transita a lo largo de los poemas. En el poema Hojas de hiel leemos:

lloran

estos vanos versos

al

árbol

asesinado

que

engendró

el

papel

donde

estos vanos versos

lloran

Lola Callejón